En un espectáculo celestial poco común, el sur de Chile se ha iluminado con la presencia de auroras australes tras 165 años de espera. Este fenómeno, desencadenado por una tormenta solar reciente, inundó de tonalidades rosadas y rojas áreas como Punta Arenas, Chiloé y la región de Aysén, convirtiendo el cielo en un lienzo de belleza natural y atrayendo la atención de miles de testigos afortunados de este fenómeno.

Las auroras australes, también conocidas como las luces del sur, son un fenómeno astronómico que ocurre en este hemisferio del planeta cuando una eyección de masa coronal del Sol interactúa con la magnetosfera terrestre, generando una danza de luces en la atmósfera. Este raro avistamiento, que había sido prácticamente inédito en estas latitudes desde 1859, se ha convertido en un evento que ha capturado la imaginación de muchos.

Aunque algunos podrían sorprenderse al descubrir que este no es el primer registro de auroras australes en la región, el último dejó una marca imborrable en esta zona de Chile. Archivos históricos (compartidos en Bío Bío) revelan que en la madrugada del 2 de septiembre de 1859, una manifestación similar de luces coloreadas sorprendió a habitantes de Concepción y Santiago. Este evento, conocido como el evento Carrington, en honor al astrónomo Richard Carrington, fue uno de los más significativos de la historia y dejó atónitos a quienes tuvieron el privilegio de presenciarlo.

El reciente resplandor en el cielo del sur de Chile ha sido atribuido a una de las tormentas solares más intensas registradas en la historia reciente, clasificada como la quinta en una escala de 5 por el Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA estadounidense. Estas tormentas, desencadenadas por emisiones masivas de partículas cargadas y radiación electromagnética del Sol, interactúan con el campo magnético terrestre y la atmósfera, creando un espectáculo celestial incomparable.

Créditos de imágenes: National Geographic, Red Geocientífica de Chile (César Quezada, UntuitSincero, Nicolás Butorovic)

Un fenómeno inolvidable

Desde Punta Arenas hasta la ciudad de Ushuaia en Argentina, las auroras han dejado maravillados a observadores y fotógrafos por igual, pintando el cielo con una paleta de colores que oscilan entre el verde, el rojo, el azul y el púrpura. Este fenómeno, que puede ser observado en lugares como La Araucanía, Aysén y Magallanes, ha generado un fervor entre los amantes de la fotografía y la naturaleza, quienes han capturado imágenes impresionantes que ahora circulan en las redes sociales.

La ciencia detrás de este fenómeno es tan fascinante como el propio espectáculo. La interacción del viento solar, compuesto por iones cargados eléctricamente, con los gases atmosféricos de la Tierra libera energía en forma de fotones, creando las brillantes y enigmáticas auroras que hemos tenido el privilegio de presenciar en estas últimas jornadas.

Aunque el cielo pronto recuperará su serenidad habitual, el recuerdo de estas luces del sur seguirá brillando en la memoria de quienes fueron testigos de este fenómeno. Las auroras australes en Chile nos recuerdan la majestuosidad y la belleza del universo, recordándonos nuestra conexión con el cosmos y la asombrosa capacidad de la naturaleza para sorprendernos una y otra vez.

Ser testigo de auroras australes es cuestión de suerte, pero más de ciencia. Para que los cielos en del Sur de Chile y de la Patagonia se iluminen de rojo o rosa, se debe presentar en la Tierra una tormenta solar como la ocurrida el pasado fin de semana. Pero quién sabe: quizás en tu próximo viaje seas uno de los afortunados en ser testigo de la majestuosidad de las auroras.

También te puede interesar: Lo mejor de Torres del Paine y Patagonia - Full